¿Qué ver y qué hacer en Bacalar? El 17 de mayo de 2021
Bacalar ya existía para la civilización maya, y de esa lengua viene su nombre, que significa “rodeado de juncos”. Fue la primera ciudad que los españoles lograron conquistar en la zona, a mediados del siglo XVI. Hoy, Bacalar tiene alrededor de 10.000 habitantes.
Al contrario de lo que pasa en los sitios más conocidos de la Riviera Maya, en Bacalar no hay una “zona turística” aparte, sino que la famosa Laguna de los Siete Colores está en el pueblo. Por eso mismo, nos pareció uno de los lugares más acogedores y “auténticos”.
Te recomendamos dedicarle un mínimo de dos días completos a la visita a Bacalar, incluso más si quieres pegarte unas buenas vacaciones de relax… Ya verás como, aun así, ¡te sabe a poco!
Ponte cómodo, que vamos a compartir diez planazos que hacer en Bacalar:
Cómo llegar a Bacalar
Bacalar está a apenas 40 minutos en coche de Chetumal, la capital del estado de Quintana Roo. Allí hay un aeropuerto pequeño donde vas a poder tomar, principalmente, vuelos domésticos.
Si vas a llegar a Bacalar directamente desde el extranjero, seguramente aterrices en el aeropuerto de Cancún, a 320 kilómetros.
En esta zona de México, nosotros te recomendamos alquilar un coche. El trayecto es muy fácil: solo hay que seguir la carretera 307, segura y en muy buen estado. Eso sí, te recomendamos hacerlo en varios días, parando en lugares tan turísticos como la reserva de la biosfera Sian Ka’an, Tulum o Playa del Carmen.
Si prefieres no conducir, puedes tomar un bus del aeropuerto de Cancún a Playa del Carmen y, allí, cambiar a otro hasta Bacalar. Creemos que solo hay una frecuencia diaria de este último, y que además tarda bastante. De todos modos, como no hicimos la ruta así, lo mejor es que compruebes tú mismo en la web de autobuses ADO.
Si solo quieres visitar Bacalar en un día, puedes apuntarte a esta excursión en español. Te recogerán y dejarán en tu hotel en la Riviera Maya e incluye toda la comida, tiempo libre y uno de los planes más populares que hacer en Bacalar: navegar en un velero.
Qué hacer en Bacalar
Ahora que ya sabes cómo llegar a Bacalar, nos ponemos directamente, y sin más rollos, con diez cosas que no te puedes perder durante tu visita.
Ya nos contarás cuáles te apetecen más o si necesitas dejar alguna para la próxima vez… ¡porque seguro que antes de irte ya te dan ganas de volver!
1. Visitar la Laguna de los Siete Colores, lo más importante que hacer en Bacalar
La laguna de Bacalar es estrechita y larga: solo mide 2 por 42 kilómetros. Sus aguas cristalinas y tranquilas y su entorno natural la han convertido en uno de los lugares más turísticos que ver en la Península de Yucatán, ¡y no nos extraña!
Se conoce como Laguna de los Siete Colores por los diferentes tonos de azul que se ven en sus aguas, dependiendo de lo profunda que sea la zona, y también de la hora del día y de la luz del sol. Nosotros pensábamos que era un nombre un poquito “exagerado”, pero te aseguramos que ahora pensamos incluso que se ha quedado corto…
Por supuesto, si hay algo que hay que hacer en Bacalar es pegarse un delicioso baño. El agua está templadita, no tiene olas y apenas cubre, así que es súper agradable y cualquier persona puede disfrutar. Nos pareció, eso sí, que en algunos puntos concretos el fondo tiene un tacto como (perdón por la comparación) masa de pizza mojada, que da bastante grimilla… aunque descubrirlo fue divertido, para qué negarlo.
En algunas zonas de la Laguna de los Siete Colores hay estromatolitos, unas estructuras organo-sedimentarias bastante raras y muy antiguas, que no se deben pisar. Nosotros no las encontramos cuando estuvimos. Sí vimos algunas de las más antiguas del mundo durante el viaje por Perth y el Sudoeste de Australia, y la verdad es que es algo curioso.
Algunos de los puntos más populares para visitar (con un kayak, paddle surf o velero, como te contamos en el siguiente punto) son:
- Canal de los Piratas: ideal para disfrutar de las vistas y, si te apetece, darte unos buenos barros
- Isla de los Pájaros: tal y como su nombre indica, te va a encantar si eres aficionado a la ornitología
- Algunos cenotes, de cierto modo integrados. El más famoso es el cenote de la Bruja
– Cómo visitar la laguna de Bacalar
La laguna de Bacalar no está abierta, sino que para poder bañarte tienes las siguientes opciones:
- Quedarte en uno de los hoteles junto a la laguna. Lo hicimos y no podríamos recomendarlo más, es lo mejor tanto logística como, digamos, “paisajísticamente”. En el último punto del artículo tienes un montón de recomendaciones.
- Lo mismo, pero con restaurantes
- Entrar a alguno de los balnearios. Nos recordaron un poco a los bagni de las playas del norte de Italia: tú pagas (unos pocos pesos) y tienes acceso al muelle que da a la laguna, hamacas, toboganes, restaurantes, tiendas, juegos, alquiler de kayak y equipos de snorkel… ¡Todo lo que quieras! Aunque hay turistas, pasar el día en uno de los balnearios es un plan que hacer en Bacalar muy habitual también para los locales. El más popular es el Balneario Mágico, pero hay varios, entre ellos el de la SAARCH, más a las afueras. Nosotros estuvimos en el primero, y la verdad es que lo pasamos muy bien.
- Muelles públicos. Dan acceso gratuito a la laguna, y suelen ser simplemente una caseta y un muelle. Nosotros no estuvimos en ninguno, pero según esta web hay al menos tres. El más famoso es el Muelle del Aserradero (avenida 1 con calle 14) y los otros están en la misma Avenida 1, en los cruces con las calles 18 y 36 respectivamente.
2. Hacer kayak o paddle board
Uno de los planes más divertidos que hacer en Bacalar es alquilar un kayak y recorrer la laguna por tu cuenta. Al ser poco profunda y no tener oleaje, cualquier persona puede apuntarte, ya que no es nada peligroso. Lo “peor” que te puede pasar es que, como nosotros, el cacharro acabe dando vueltas sobre él mismo y te entre la risa y no puedas parar… en serio, ¡una experiencia muy placentera y divertida!
De hecho, como ves en la foto, íbamos con gafas y móvil (con bolsita protectora, claro) y tan tranquilos. Nada que ver con otras veces que hemos hecho kayak, por ejemplo en Byron Bay, Australia.
Nosotros alquilamos el kayak en uno de los balnearios, aunque nuestro hotel y la mayoría de alojamientos también los ofrece. No recordamos cuánto cuesta exactamente, pero seguro que no mucho.
Otra actividad chula que hacer en Bacalar es paddle board. Nosotros no nos atrevimos porque no lo habíamos hecho nunca, pero cuando vimos a un grupo volviendo justo al amanecer, nos devoraba la envidia. ¡Parecía de película! La próxima vez no nos lo perdemos, aunque pasemos más tiempo a remojo que otra cosa.
Justo The Yak, el hotel donde estuvimos (y que nos encantó) ofrece la actividad al amanecer y al atardecer. Te recomendamos, eso sí, reservarla de antemano, ya que suele estar muuuy solicitada. Puedes hacerlo a través de este enlace:
Paddle Surf en la Laguna Bacalar
Por último, es también muy popular recorrer la Laguna de Bacalar en velero. Suele ser una actividad que va incluida en algunas excursiones desde la Riviera Maya, o bien que has de buscar directamente allí. Como nosotros no lo hicimos, te recomendamos que preguntes en tu alojamiento, ¡y nos cuentes qué tal te va!
3. El fuerte de San Felipe en Bacalar
Este fuerte es uno de los principales lugares que ver en Bacalar. Está justo entre la laguna y la plaza principal, así que no vas a tener problema para encontrarlo.
El fuerte tiene cuatro baluartes y una típica planta de estrella. Fue construido en la primera mitad del siglo XVIII, para proteger a la población de posibles ataques piratas. Recuerda que Bacalar está súper cerquita de Belice, colonia inglesa, por lo que era zona calentita..
Está realizado con piedras de la zona (y, de hecho, salvando las distancias puede recordar a Tulum, por ejemplo).
Paradójicamente, hoy el fuerte de San Felipe está convertido en un museo sobre la Guerra de Castas y la piratería. Aunque es interesante y no es muy grande, no nos pareció una visita imprescindible que hacer en Bacalar, ya que no teníamos demasiado tiempo. Dicho esto, al parecer está muy cuidado y destaca por su mural y, por supuesto, las vistas a la laguna.
- Abierto de 9 a 19 horas. Cierra los lunes
- 31 pesos para nacionales (con descuento para niños, estudiantes y jubilados) y 73 para extranjeros. Suele cambiar cada año, mejor comprueba una vez allí
Junto al fuerte hay un jardincito súper agradable, donde te puedes tumbar tranquilo un rato sin problema. En él hay una especie de anfiteatro pequeñito de piedra que no entendemos muy bien; cuando fuimos, estaba lleno de peques jugando.
También allí vas a poder unirte a uno de los planes más típicos que hacer en Bacalar: posar delante de las típicas letras de grandotas y de colorines, con el nombre del pueblo. Que sí, que son “una turistada”… pero ¿y lo bien que se lo pasa uno allí, posando?
4. Nadar en el Cenote Azul (o solo mirar)
A unos 5 minutos en coche del centro del pueblo vas a encontrar uno de los cenotes más llamativos y espectaculares de la Península de Yucatán.
Como imaginarás por su nombre, además, su color azulón es intenso y hace mucho contraste con el verde de la selva. Aunque está muy cerquita de la laguna, no conecta con ella en ningún punto; vamos, que es un círculo totalmente cerrado y casi perfect.
El Cenote Azul no solo es grande de diámetro, ¡es que se cree que tiene casi 100 metros de profundidad! Si lo piensas, da hasta miedito… Por eso, nadar allí no es una broma: sigue las indicaciones y ten precaución.
No te extrañes si lo ves en los mapas como Restaurant Eco Turístico Cenote Azul, ya que el acceso es a través de este establecimiento. Aunque no es obligatorio, verás que te apetece tomarte una birra. El ambiente y el paisaje invitan a ello, ¡sobre todo después de un baño en las aguas fresquitas del cenote! Además, no es un sitio especialmente caro (dicho sea de paso que nosotros no pedimos comida). ¿Se te ocurre un plan mejor que hacer en Bacalar?
Puedes ir en tu coche, siguiendo la misma carretera 307. Allí hay parking, aunque no es muy grande. También puedes tomar un taxi, pero en ese caso te recomendamos que preguntes antes en tu alojamiento por un precio aproximado y un conductor oficial de confianza.
- Abierto de 10 a 18 horas, todos los días
- Entrar cuesta 25 pesos mexicanos por persona
5. Visitar Los Rápidos
Tenemos que confesar que, cuando decidíamos qué hacer en Bacalar, ni habíamos oído hablar de Los Rápidos. Una vez allí, no nos dio tiempo a ir así que lo tenemos pendiente… De todos modos, queríamos compartirlo contigo para que no te lo pierdas, ¡porque tiene pintaza!
Los Rápidos es un balneario a unos 13 kilómetros al sur de Bacalar (igualmente siguiendo la carretera 307). Como en el caso anterior, el acceso es a través de un restaurante y, por lo visto, tiene más servicios, como por ejemplo alquiler de kayak.
Está justo dividiendo la laguna de Bacalar y la de Xul-Ha. Aunque ambas son un remanso de paz, hay un flujo constante de agua entre ellas, que hace de la zona intermedia (aka Los Rápidos) más movidita. Tanto, que hay quienes se llevan un flotador o barquita. ¿Imaginas?
6. Perderse por el pueblo y descubrir lugares que ver en Bacalar diferentes
Como te comentábamos al principio, nos gustó mucho que Bacalar, como pueblo más allá de lo turístico, es muy accesible. Por eso, es muy fácil (¡y recomendable!) darse una vuelta sin rumbo fijo y descubrir taquerías, tienditas de abarrotes, callejuelas…
Tenemos que decir que nos dimos varios paseos, incluso por la noche, y no tuvimos ningún problema, ni vimos nada raro, ¡al contrario! Vamos, que no hay razón para no poner el paseo por el centro del pueblo en tu lista de cosas que hacer en Bacalar…
Seguramente, lo primero que vas a ver, con permiso de la laguna, es Zócalo o parque central. Como en el resto de localidades de la Península de Yucatán, esta “plaza mayor” es el centro social y cultural, además de un lugar súper agradable donde sentarse a tomar el fresco y sentirse, casi, como un local. Recordamos que, cuando estuvimos, estaban celebrando el Día de la Mujer con una mega clase de zumba. ¡Nos lo pasamos pipa!
También es muy popular la Parroquia de San Joaquín, el patrón de Bacalar. Está a apenas 5 minutos de la plaza.
La iglesia, construida en el siglo XIX, es de ese característico estilo colonial que nos encanta, con la fachada pintada en amarillo clarito. Por dentro es bastante sencillita, y siempre suele haber personas rezando por lo que hay que ser respetuoso con el tema fotos y demás. No hay problema para entrar al recinto y dar una vuelta, ¡así que aprovecha!
7. Comerte una paleta en la Heladería Annie
Probar la gastronomía local es uno de los mayores placeres al viajar, ¿no crees? Pues te prometemos que, en México, la cosa ya se sale del molde!
Una de las cosas que más nos gustaron fueron las paletas, una especie de polo de hielo más cremosito. Si no nos zampamos dos al día, ¡no fue ninguna!
Además de paletas tienen aguas y helados que, aunque no probamos, tenían buena pinta. En general, hay mucha variedad de sabores, y a buen precio.
La Heladería Annie Delicias es genial porque, además de ser un negocio local y familiar, está muy cerca de la plaza. Así, puedes puedes comprar tu paleta o helado para llevar y sentarte a disfrutar del ambientillo y de el “ver a la gente pasar” que tanto nos gusta. ¡Un plan ideal para hacer en Bacalar!
- Abre todos los días, de 10 de la mañana a 10 de la noche
- Calle 22, Centro
8. Tomar tacos ¡y marquesitas!
Si prefieres tomarte unos ricos tacos o tortas a buen precio y en un sitio igualmente 100% local, nosotros estuvimos en la Taquería El Socio y nos encantó. Además, está en una calle muy animada con librería, varios cafés… a apenas 5 minutos caminando del Zócalo.
De postre, o para merendar, nada mejor que una marquesita. Ya verás que, sobre todo al atardecer, hay varios puestecitos vendiendo esta especie de crepe, pero más crujiente y tipiquísimo del Yucatán.
Hay un montón de opciones para acompañar a tu marquesita, pero la típica es de queso y mermelada. ¡Está deliciosa! Pedir una y sentarte a comerla en un banco de la plaza es un plan tranquilo, económico y muy hedonista para hacer en Bacalar así que ¡disfrútalo!
9. La excursión a Calakmul, una de las mejores cosas que hacer en Bacalar
Una de las grandes espinitas que se nos quedaron por hacer en Bacalar fue escaparnos a visitar la zona arqueológica de Calakmul. Intentamos cuadrarla como sea en el itinerario de viaje a México en dos semanas, pero nos quedamos sin tiempo. ¡Para la próxima!
Ya en el estado de Campeche y muy cerca de la frontera con Guatemala, fue una de las principales ciudades de mesoamérica. Allí vas a poder ver, prácticamente escondida en la selva, una zona arqueológica de cerca de 2 kilómetros cuadrados, dominada por una enorme pirámide de 45 metros, ¡un tercio más alta que la de Kukulkan en Chichén Itza!
Estamos seguros de que tiene que merecer mucho la pena. Eso sí, ten presente que está lejillos (a unos 230 kilómetros), por lo que ir y volver en el día conduciendo tiene que ser un palizón. Para que todo sea lo más cómodo y fácil posible, te puedes apuntar a esta excursión a Calakmul desde Bacalar en español.
Como plan b tienes las zonas arqueológicas de Becan y Kohunlich, dos de las más desconocidas, pero igualmente increíbles. Además, están más cerquita. Puedes echar un vistazo a ver qué te parece esta excursión a Becan desde Bacalar de un día.
10. Ver el atardecer… y el amanecer
Vamos a cerrar esta lista de cosas que hacer en Bacalar con una que, creemos, no te puedes saltar.
Como te decíamos en el primer punto, la Laguna de los Siete Colores recibe ese nombre porque sus aguas van cambiando de tonalidad dependiendo de la hora del día, de la luz… y, por supuesto, los mejores momentos, son el amanecer y el atardecer.
Aunque no seas una morning people como nosotros (vamos, que solemos madrugar) te recomendamos que, al menos una vez, pongas la alarma temprano y disfrutes de los primeros rayos de sol en Bacalar.
No olvides tu cámara, pero tampoco te obsesiones con sacar la foto perfecta o te vas a perder el espectáculo… ¡Te aseguramos que va a ser una experiencia única!
Dónde hospedarse en la laguna Bacalar
Que quede claro: el pueblito es encantador per se y hay más lugares interesantes que en Bacalar además de la laguna.
Dicho esto, y teniendo en cuenta que el acceso no es totalmente libre, no podemos recomendarte lo suficiente que te quedes en uno de los hoteles que dan a la Laguna de los Siete Colores. Esto es no solo porque vas a poder bañarte y disfrutar de ella cuándo y cómo quieras, sino que asomarte a la ventana y verla, especialmente al amanecer como comentábamos en el punto de arriba ¡no tiene precio!
Nosotros nos quedamos en The Yak Lakehouse. Con habitaciones dobles, cuádruples y también a compartir (ideal para ahorrar), es un sitio limpio y cómodo que está, literalmente, en la laguna. Imagínate lo que es tomar tu desayuno (incluido) en una hamaca con esas vistas, o tomarse una cervecita por la noche sin salir de tu hotel… Un plan único y “lujoso” que hacer en Bacalar, a un precio asequible.
Como no te lo podemos recomendar más, aquí te dejamos el link para que mires disponibilidad y precios, y por supuesto hagas tu reserva si te convence. Si vas a viajar a México en temporada alta, hazlo con antelación, please:
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